El preámbulo a la entrevista de Ricardo Poma a El Diario de Hoy (25/02/2009) era necesario. Era necesario para condicionar al lector y realzar las palabras del entrevistado. La entrevista a secas es algo insípido. Se trata de la enésima versión recocida de lo mismo. Es lo que nos vienen repitiendo los diferentes editorialistas de todos los órganos de condicionamiento ideológico que se difunden en el país. Nada pues que venga a trastornar el dispositivo argumentativo que la derecha recalcitrante nacional ha venido repitiendo todo este tiempo y aún antes. No obstante la entrevista tiene mérito y vale la pena leerla. ¿Por qué? En primer lugar se trata como dice el preámbulo de la entrevista de un oligarca salvadoreño, que se manifiesta a partir de su posición en la sociedad y en defensa de sus intereses. Muestra además el íntimo nexo entre el partido en el poder con la clase dominante. Al mismo tiempo de manera casi caricaturesca nos ofrece un compendio del argumentario de los Altamirano o de los Dutriz, de los Saca o de los Ávila. El prologuista de la entrevista nos dice que Poma se expresa “sin mayores aspavientos ni dramatismos fáciles». No obstante desde la primera respuesta nuestro oligarca afirma que lo que está en juego en las próximas elecciones es nuestra libertad y la democracia. ¿No se trata de una dramatización afirmar que lo que nos estamos jugando en las próximas elecciones es la libertad, la democracia? Pero esto además es simplemente una frase de contenido clueco y vacuo. Las palabras libertad y democracia no significan nada cuando se usan como simples estándares propagandísticos, cuando la única libertad que se considera sagrada y concreta es la propiedad privada de los grandes medios de producción. Porque si nos ponemos a darle contenido concreto a la libertad, veremos que es todo lo que se nos ha negado y que no corremos ningún riesgo de perder porque no lo tenemos. Veamos las cosas tal cual existen hoy. ¿Tenemos los salvadoreños la libertad de alimentarnos convenientemente? ¿Podemos vestirnos y vestir a nuestras familias con total decencia? ¿Vivimos todos en casas que ofrezcan espacio suficiente para todas nuestras actividades domésticas? ¿Los padres pueden dormir tranquilos porque el futuro de sus hijos está asegurado? Me refiero a sus estudios, a su salud, a su desarrollo espiritual, a su trabajo. ¿Podemos los salvadoreños transitar libremente y en seguridad por las calles de nuestras ciudades? ¿La criminalidad en el país no es una de las más elevadas del continente? La ausencia de todo esto merma permanentemente nuestra libertad. ¿Es de esta libertad de la que habla Poma? ¿Se refiere nuestro oligarca a la libertad que han tenido nuestros compatriotas de salir huyendo de la miseria hacia los Estados Unidos? ¿A la libertad que han encontrado en Tapachula muchas de nuestras jóvenes en los burdeles de las zonas de tolerancia? ¿A la libertad de arriesgar su vida atravesando a pie los áridos desiertos del Norte? El prologuista de seguro va a decir que estoy dramatizando. Otros de delicada fineza dirán tal vez que juego con los sentimientos. No obstante sin estas cosas concretas, como la de poder comer convenientemente, vestirse decentemente, poder acudir a un médico sin poner en riesgo el presupuesto familiar, tener las medicinas necesarias, acudir a los espectáculos, etc. la palabra libertad no tiene ningún sentido. Asado y refrito Pero voy a enfrentar directamente al riesgo que quiere señalarnos Ricardo Poma. Según puede deducirse de lo que expone en su entrevista, el 15 de marzo los salvadoreños van a optar por continuar gozando de la democracia y de la libertad o por un régimen totalitario. Es lo que nos repite Altamirano y los otros todos los días. Lo afirman y lo repiten. Lo repiten y lo afirman. Lo machacan. ¿Nos han aportado un pizca de prueba? ¿Una cita de algún discurso de Mauricio Funes? ¿Nos han citado el programa del candidato o del programa legislativo del FMLN? Nunca, ni una sola vez han sido capaces de esbozar una prueba, de respaldar sus afirmaciones con un texto, con algo. Lo mismo hace Ricardo Poma. Lo que ha caracterizado los regímenes de ARENA durante estos veinte años de poder absoluto es la agravación de la situación de la libertad de los salvadoreños. Hablemos de la democracia salvadoreña. Ricardo Poma como buen patrón que es ha de considerar que los trabajadores no necesitan de sindicatos para defender sus derechos. Para eso están los patrones que saben perfectamente que necesitan sus empleados. Los sindicatos son totalitarios, manipulan a la gente, quieren siempre poner en peligro a las empresas. Entonces lo mejor para la democracia es no permitirlos o limitar a lo máximo su funcionamiento. Este es el pensamiento democrático que ha gobernado en El Salvador desde siempre. Y para los subversivos que querían imponer este organismo antidemocrático no cabía, ni cupo otro remedio que la represión, incluyendo la tortura hasta llegar al asesinato. ¿Estoy exagerando? ¿No ha sido esta nuestra historia? El último episodio de la aceptación del convenio de ¿Qué decir de Pero el entrevistado nos advierte que también está en peligro “el futuro de nuestros hijos y el avance o retroceso de una generación de salvadoreños». Y les recuerdo que según el prologuista lo hace sin “sin mayores aspavientos ni dramatismos fáciles». Le agrego por mi parte que también sin ningún contenido real, ni significativo. ¿Continuismo o cambio? esta es la pregunta.
Las elecciones legislativas pasadas, como las presidenciales del 15 de marzo, van a incidir obligatoriamente en el futuro de nuestros hijos. Son elecciones nacionales. Por lo tanto Ricardo Poma es también un Perogrullo. En realidad lo que está en juego es la permanencia de una sociedad que admite como gran paso hacia adelante la limosna que distribuye el gobierno en su famosa Red Solidaria y otro tipo de sociedad que se proponga extirpar la extrema pobreza que agobia a tantas familias salvadoreñas. El tipo de sociedad en que vivimos tiene como valor fundador y más alto la libertad de producir ganancias. ¿Pero quién puede emprender? ¿Quién recibe las ganancias producidas? La crisis que azota las sociedades capitalistas ha puesto al desnudo el hiato que existe entre el objetivo de la máxima ganancia y los intereses de toda la sociedad. Ahora bien, ¿cuál de los dos candidatos trata de contrarrestar los efectos nefastos de este principio director? Dejo que cada uno responda. No obstante puedo afirmar que ninguno de ellos pone francamente y de manera determinante en entredicho la propiedad privada de los medios de producción. Se habla apenas de un mejor reparto de las riquezas. No obstante la derecha nos pinta un panorama futuro de trabajos forzados, de niños esclavizados e incluso separados de sus padres. Porque en los delirios editoriales de los matutinos se ha llegado hasta este tipo de necedades. Lo que se nos plantea en las próximas elecciones no es pues un cambio radical de sociedad. Mauricio Funes ha hablado de reformas, de cambiar el rumbo de las prioridades, de invertir en servicios para la población, mejorar los existentes. Los medios propuestos para alcanzarlos tampoco ponen en peligro los privilegios de la oligarquía, tal vez uno, el de poder evadir capitales e impuestos. Apenas si se ha hablado de revalorizar los salarios. No se trata pues de ninguna manera de un cataclismo social que se nos avecina. Por mucho que los editorialistas y los oligarcas quieran infundir miedo, mostrándonos el cuco del comunismo, no se va a decidir en el próximo escrutinio la ruptura con el régimen capitalista. Pero para los oligarcas, para el poder actual, este cambio propuesto por Mauricio Funes constituye ya un escándalo. Prefieren el continuismo, seguir con las limosnas como acción social y seguir construyendo carreteras para el transporte de sus mercancías, dejando de lado la preparación de la gente para actividades de mejor calidad. Porque la oligarquía ha sido incapaz de proponernos un futuro de nación. Ricardo Poma tiene el descaro, no puedo llamarlo de otro modo, al afirmar que en tanto que país tenemos ahora la capacidad de invertir. Un país cuya población en su gran mayoría está endeudada, que no puede ni siquiera generar el más mínimo ahorro, puede tener realmente en tanto que tal capacidad de invertir. Los que podrían invertir en la producción no lo han hecho, su prioridad en los últimos años ha sido principalmente la especulación. En tanto que país, en lo privado, como en lo público, estamos endeudados. El futuro lo tenemos ya hipotecado. Si los salvadoreños optan el próximo 15 de marzo por el continuismo arenero, seguiremos agravando la hipoteca. Lo que necesitamos es un cambio de rumbo. Sacar al país de esta muerte ineluctable, fuga de sus hijos, desesperados por la ausencia de posibilidades, miseria crónica en el campo. La gestión arenera ha demostrado hartamente su incapacidad de gestión, en estos momentos el gobierno central se dedica a malabarismos para enfrentar los gastos corrientes, los pagos de salarios de sus empleados, para pagar las subvenciones, para asumir lo poco que asume en la salud pública. Ricardo Poma quiere persuadirnos que vivimos en El Dorado. ¿Los salvadoreños seguiremos interpretando el papel de Cándidos, al que nos han obligado a fuerza de engaños y de garrote? |
02 marzo 2009
El oligarca en su El Dorado
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"La situación económica mundial y la incertidumbre de las elecciones han hecho difícil el acceso al crédito. Necesitamos restablecer el crédito a los sectores productivos y en particular a la pequeña y mediana empresa, a la agricultura y para la adquisición de vivienda. La vivienda es la inversión más importante que hace una familia, y el sector de la construcción es el que más efecto multiplicador tiene en la economía."
ResponderEliminarEste trozo extractado de la entrevista de EDH al Sr. Ricardo Poma me parece especialmente significativo porque trata en alguna forma de desviar la situación local de El Salvador hacia la crisis mundial, como tratando de evadir la responsabilidad que le atañe al empresario salvadoreño, como tratando de exculparlo. Ha sido la política depredadora de esos empresarios la que ha iniciado desde hace ya ratos, la depresión económica que sufre el país. Si bien es cierto que el crédito se ha restringido en El Salvador ha sido por la falta de capitalización de los bancos que ya no son nuestros y en eso si ha incidido la crisis mundial, pero aquí los Poma, Cristiani, Meza, etc. perfectamente podrían llenar ese vacío invirtiendo localmente, depositando sus fondos en el país, en vez de cacarear sobre la inversión extranjera la que a la larga no es beneficiosa pues lo único que deja son salarios de hambre.
Me parece cínica la afirmación del Sr. Poma al insistir en la adquisición de vivienda pues él es el mayor constructor de viviendas en El Salvador mediante su empresa El Roble, lo que al mismo tiempo lo ha convertido en el mayor especulador del valor de la tierra al urbanizar tierras que estaba catalogados como tierras de vocación agrícola, tierras que se valoraban en su tiempo a 50 centavos de colon por vara cuadrada y hoy se venden a 30 dolares.
Es claro que las libertades de que habla defender el Sr. Poma son las relacionadas con sus intereses particulares, cosa que puede ser aceptable, pero lo que resulta inaceptable es la hipocresía con la viste su argumentación al pretender convencer al auditorio con la falacia de que esos intereses, los suyos, son los de todos los salvadoreños; soslaya, el Sr. Poma, el problema que su argumento en defensa de sus intereses conlleva en su seno como es la corrupción, rapacidad e impunidad rampantes en los gobiernos de Arena.
Como siempre, don Carlos, disfruto en gran manera sus artículos,
Atentamente
Quijo-t
Lo más lamentable de todo, es que hay muuuuchas personas que todavía se dejan dominar por este tipo de personas.
ResponderEliminarDiscursos trillados, clichés de a dos por "cuis", falta de originalismo... y aún así... les creen. Eso es lo que entristece.
Buen artículo don Carlos.
Saludos
¡Vaya blog con el que me vine a encontrar! Simplemente magistral don Carlos, muchas gracias por exponer tan claramente la situación de los hermanos salvadoreños.
ResponderEliminarsaludos desde Guatemala.
en nuestra situacion actual no solo influyen las personal como estas que mencionan si no los factores externos los cuales podrian ser las remesas,inmigracion masiva y por supuesto la crisis que nos afecta mucho mas por depender de una economia.Pero las cosas pueden cambiar Arena se a renovado y sus propuestas son concretas.Asi que pensemos aquin le podemos dar el futuro de nuestro pais.
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