El autor de este blog agradece la reproducción total o parcial de los materiales aquí publicados siempre que se mencione la fuente.

27 septiembre 2010

El Pasquin de Hoy miente

La repugnate campaña que han desatado los medios contra el fallo de la Sala de lo Constitucional es digna de la baja calidad de la prensa. Los editorialistas, comentaristas y demás acólitos de los Altamirano y de los Dutriz simplemente mienten, con descaro, con saña. En el editorial de este día El Pasquín de Hoy trata de asustar a sus lectores y de volverlos cómplices de sus mentiras.


Antes de que el diputado Parker propusiera la enmienda en la Asamblea al inciso tres del artículo 191 del Código Penal, nadie se quejaba, nadie corría el riesgo de que lo priven del derecho a opinar, a criticar y a denunciar. El fallo simplemente ha vuelto a poner en su puesto lo que el abogado del Pasquín de Hoy había logrado cambiar. Con esa enmienda los dueños de los diarios, los editores, los directores, redactores quedaban exentos de pena, si se dedicaban a calumniar, a atentar contra el honor de las personas. Los magistrados con muchísima razón han juzgado que no existen motivos reales para que estos personajes reciban un trato de favor, que ellos no reciban el mismo castigo que cualquier otro hijo de vecino.


La campaña que han desatado es repugnante pues mienten a sus lectores y abusan de su confianza. Con esta campaña están experimentando su capacidad de llevar adelante nuevas campañas contra medidas sociales y democráticas, que pueda tomar este gobierno o los futuros gobiernos de izquierda. Con ella insinúan que es la libertad de expresión la que está en peligro, pero van aún más lejos en el embuste, desean ligar este fallo a la nueva situación política creada por la victoria electoral del FMLN en la elección presidencial, cuando auspiciado por esta institución llegó a la presidencia Mauricio Funes. La superchería es tal que han dado a entender que los nuevos magistrados están al servicio de los ocultos designos del régimen y del FMLN, que pretenden introducir el “chavismo” en El Salvador.


Han creado un demonio y nos quieren a cada vuelta de esquina sorprender con ese espanto. Pero cada vez les resulta más difícil engañar impunemente, cada vez les cuesta más tejer sus falacias, sus patrañas. ¿Qué tiene que ver el presidente de Venezuela con el nuevo fallo de la Sala de lo Constitucional? Han repetido tantas veces que en Venezuela no hay libertad de expesión, que no existe prensa de oposición, que en Venezuela no hay medios libres, tanto han mentido que se han tragado ellos mismos el embuste. Piensan que con esta mentira nos van a hacer temblar de miedo. Los medios en Venezuela en su inmensa mayoría opinan libremente contra el régimen de Chávez y sirven de relevo a las campañas confeccionadas en Washington contra el gobierno de su país. Esta es la realidad, en Venezuela la prensa de derecha es mayoritaría y sale todos los día, las radios de derecha son mayoritarias y las cadenas de televisión de derecha son mayoritarias y difunden todos los días.


Es necesario que defendamos este fallo de esta infame campaña, es urgente que no dejemos a estos esbirros del embrollo seguir envenenando el ambiente nacional. Si los dejamos sin responder, sin reaccionar con toda la energía necesaria, nos pueden inundar en el fago de sus mentiras.

2 comentarios:

  1. Gracias al Dios Verdadero en mi hogar no penetran esos pasquines: diablodioy,perra trágica, el inmundo y máskk; tampoco hay cabida para tv 2, 4, 5, 6, 7 ó 33, 12, 17, cnn y más; ni para radiodifusión bajera.

    Nos bastamos y satisfacemos nuestras necesidades de información con: Co-Latino, Independiente, YSUCA, Maya Visión, Radio Habana, TeleSur, El Trompudo con sus blogs afines a los cuales él sirve como nave nodriza y nada más.

    ResponderEliminar
  2. Anónimo1:44 p. m.

    Es saludable que salga todo el veneno, se les va ubicando, y lo mas importante, los políticos que bailan la misma cumbia, para reconocerlos, si no salen, no se sabe por donde andan

    ResponderEliminar

Todo comentario es admitido. Condiciones: sin insultos, ni difamaciones.