Recientemente publiqué un artículo sobre este mismo tema (para leerlo pulse
aquí), me
gustaría continuar ahora con dos puntos que, me parece, pueden ir adelantando
un poco sobre el estudio del método de Marx. La manera justamente en la que estoy
procediendo no es la que mejor se apega al método marxiano. Me explico: estoy
dando impresiones, consideraciones, hipótesis y por lo general cuando Marx
aplica su método, como en la “Contribución a la crítica de la economía
política” o en “El Capital” pone particular atención en la exposición del
material y comienza realmente por el principio, es decir por poner ante nosotros
la forma
elemental de la riqueza del mundo burgués: la mercancía.
Marx despunta con la mercancía y su doble aspecto: valor de uso y valor de
cambio. Empieza pues por lo que muchos han llamado la “célula” del tejido
económico de la sociedad capitalista. Se trata de una metáfora, por cierto muy ilustrativa,
pero al mismo tiempo un poco perniciosa, pues sin que los que la usan, se lo propongan,
nos devuelve a los símiles precientíficos, cuando lo social se asimilaba a los
organismos animales. Y lo que es peor, nos priva de un concepto metodológico y
filosófico sumamente importante: forma
elemental. Esta forma elemental
es una y al mismo tiempo se presenta en su doble aspecto. Uno de estos aspectos
es la parte puramente material, la que puede satisfacer alguna necesidad y que
se realiza en el consumo. “El modo de existencia de la mercancía en tanto que
valor de uso coincide con su modo de existencia físico tangible”.
Marx es el gran pensador moderno de la forma. Es por ello que es importante
seguir en sus obras económicas y sociales todos los desarrollos que efectúa
respecto a las distintas formas que va abordando. En la historia de la ciencia
se ha buscado justamente estas formas
elementales, la célula misma, los átomos fueron en su momento las formas elementales de sus ciencias
respectivas. El avance de la ciencia ha ido obligando a los científicos a
redefinir cuál es esa forma a partir de la cual hay que iniciar la descripción
de la materia estudiada. Aquí no estoy empleando la palabra “materia” como
sinónimo de asignatura, sino como parte de la materialidad del mundo.
Desde la primera página de la “Contribución”, Marx nos introduce a otra
forma: la forma social de la riqueza.
El valor de uso es el contenido de
esta forma social de la riqueza y nos
dice que este contenido es indiferente a la forma
social. Un pedazo de queso puede ser producido por un esclavo, un siervo o
un obrero y el gusto será más o menos el mismo y satisface siempre el mismo
tipo de necesidades. Lo que significa que el valor de uso no expresa una
relación social de producción. “Parece que para la mercancía es una condición
necesaria ser valor de uso, pero que es indiferente al valor de uso ser una
mercancía”. En tanto que valor de uso, la mercancía aún no entra en el dominio
de la economía política. Entra en este dominio cuando ella misma constituye una
determinación formal. Entonces la mercancía constituye la base material sobre
la que se manifiesta de manera inmediata una relación económica determinada, el
valor de cambio. Luego Marx
desarrolla en detalle en qué consiste el valor de cambio. Lo que deseo señalar aquí
precisamente es el punto de partida de la exposición del material, Marx inicia
todo el desarrollo de sus teorías económicas de lo más sencillo hacia lo más
complejo, si se quiere de lo más abstracto hacia lo más concreto, pues Marx
pretendía terminar su exposición con el análisis del mercado mundial y
entendiendo que lo concreto es la unidad de múltiples y distintas determinaciones.
El otro punto metodológico de Marx que deseo abordar es justamente su
crítica del mal uso de la abstracción, de la mala abstracción. Un ejemplo de esta crítica la encontramos en las
primeras páginas de la “Introducción a la crítica de la Economía política”. Tanto
Smith, como Ricardo comienzan sus explicaciones por el “cazador y el pescador singular
singularizado” que se trata de una de esas “chatas ilusiones de las robinsonadas del siglo XVIII”. Este
cazador y este pescador representan al productor universal, atemporal y desposeído
de toda determinación. “En esta sociedad donde reina la libre concurrencia, el individuo
aparece desconectado de lazos naturales, etc. que lo convierten en épocas
históricas anteriores en accesorio de un conglomerado humano determinado y
delimitado”, el individuo productor “aparece en un estado de dependencia,
miembro de un conjunto mayor: este estado se manifiesta en primer lugar de
manera totalmente natural en la familia, y en la familia ampliada hasta formar
la tribu, luego en las diferentes formas de comunidad salidas de la oposición y
de la fusión de las tribus. Es solamente en el siglo XVIII, en la “sociedad
civil burguesa” que las diferentes formas de la interdependencia social se le
presentan al individuo como un simple medio de realizar sus fines particulares,
como una necesidad exterior. Pero la época que engendra este punto de vista, el
del individuo singular singularizado, es precisamente en la que las relaciones
sociales (y desde ese punto de vista, universales) han alcanzado el desarrollo
más grande que hayan conocido. El hombre es, en el sentido más literal, un zôon politikon, no solamente un animal
sociable, sino un animal que no puede constituirse como individuo singular sino
que únicamente al interior de la sociedad”.
El cazador y el pescador de Smith y de Ricardo son este individuo del siglo
XVIII, productos “de una parte de la descomposición de las formas de la
sociedad feudal y por otra parte de las fuerzas productivas nuevas que se han
venido desarrollando desde el siglo XVI”.
Este individuo se les presenta como un ideal, cuya existencia remonta
hasta el pasado más remoto. Este individuo no es para ellos “un resultado histórico,
sino […] el punto de partida de la historia, puesto que lo consideran como un
individuo natural, conforme a su representación de la naturaleza humana, que no
tendría su fuente en la historia, sino que habría sido puesto por la naturaleza”.
Es por eso que ellos se imaginan al cazador o al pescador produciendo en la
total soledad y creando riquezas de la manera más solitaria como un Robinson
Crusoe. Este tipo de abstracción en el que se le despoja al individuo de todo
lo que hace su esencialidad, las relaciones sociales, históricamente
determinadas, son las que más abundan en las más “refinadas” filosofías
modernas e incluso en algunas ciencias que prefieren hablar del “hombre” y no
de los individuos.
Nelson Carranza.
ResponderEliminar1 de Mayo 2013 la lucha es de clases antagonicas
entre proletariado y burguesia-sus aliados...
Bloque Popular Revolucionario BPR
Movimiento Social Autonomo de El Salvador MOSAES
Concejo Estudiantil Universitario CEU-FUPR
FSR-MOESS Federacion Sindical Revolucionaria
Movimiento Obrero Organizado Sindical y Gremial
Socialistas de El Salvador
"MOVIMIENTOS DISIDENTES"...
que bonito calificativo que nos colgaron los
del frente FMLN derechistas y quienes se hacen
eco WWW.DIARIO COLATINO.COM
Movimientos disidentes también marchan
Los Movimientos y Sindicatos “no afines” al FMLN organizaron su propia marcha del día del Trabajo. Salieron de la esquina opuesta del Hospital de Niños Benjamín Bloom hasta llegar a la Plaza Libertad.El recorrido de este sector fue fuertemente custodiado por agentes de la PNC, ya que se integró el grupo de estudiantes anarquista, de la UES.Incluso, a la altura de la Juan Pablo II, unos 20 elementos de la UMO tuvo que detener la marcha para evitar, una confrontación directa con la que salió de empleados, sindicatos tildados de “afines” al FMLN.Los sindicatos exigieron mejores condiciones salariales y cumplir las “promesas de campaña” al actual gobierno.PNC monta operativo con 800 elementos El subdirector de la PNC, Mauricio Ramírez Landaverde, aseguró que desde la cinco de la mañana de hoy, se montó un fuerte dispositivo para evitar desórdenes en el desarrollo de las tres marchas conmemorativas al día del trabajo.El titular aseguró que fuerzas especiales de la UMO, tránsito terrestre y seguridad pública estaban participando en el dispositivo de seguridad.Al cierre de esta edición las autoridades no tenían datos de detenciones por desórdenes o otros hechos de violencia.